Fidel Castro y su relación con el Perú

Lima.- El pasado 25 de noviembre, a las 10:15 pm (hora local), el gestor de la Revolución Cubana y último símbolo del comunismo en América Latina, Fidel Castro, falleció a los 90 años tras haberse alejado del poder hace diez años.

De Fidel, se puede hablar de elogios y críticas por la forma cómo se condujo en vida por su revolución de otra época. Su imagen fue destacada en la región sudamericana. Y Perú no podía estar exento de este acercamiento.  A continuación sus lazos, desencuentros y homenaje.

Apoyo a la Revolución

En 1959, Castro se alzó en armas y derrocó al dictador Fulgencio Batista para tomar el poder en Cuba. Un año y medio después de dicha acción revolucionaria, la posición del Perú se vio reflejada en una reunión de ministros de Relaciones Exteriores en Costa Rica, donde se debatía un castigo a la isla por el régimen que se había instaurado.

Por nuestro país, el canciller Raúl Porras Barrenechea tuvo su intervención con las siguientes palabras: “La no intervención es, pues, uno de los puntos claves del interamericanismo”, lo cual significó, en pocas palabras, su respaldo a Cuba. Además, que confiaba en la promesa de que la revolución de Castro no se iba a desviar en sus idéales que lo motivaron a realizarse.

La consecuencia de este acto del ministro peruano fue que, a su regreso a Lima, renunció debido a que no cumplió la orden del entonces presidente Manuel Prado, quien le dijo que respaldará el castigo para el régimen de Castro en la isla. Pocos días después, Porras murió de un paro cardiaco.

Asimismo, a finales de 1960, Perú rompió relaciones diplomáticas con Cuba y se cerró la agencia de noticias Prensa Latina.

Gestos con el Perú

Pero, cuando llegó el militar Juan Velasco Alvarado al poder, todo cambió. En 1970, Perú tuvo uno de sus peores terremotos que desapareció a la ciudad de Yungay en la región de Ancash. Para esa situación, el líder de la Revolución Cubana envió ayuda a los damnificados e, inclusive, lideró una campaña para donar sangre.

Un año después, tras su gira por Chile, Castro visitó el Perú y se encontró por unas horas con Velasco Alvarado en el aeropuerto Jorge Chávez. “Nunca en tan breves minutos ha habido tanta comunicación y tanta confianza como las que se han producido en estos minutos en que nosotros hemos conversado con el gobierno de las Fuerzas Armadas“, dijo en su momento. Al siguiente año (1972), el gobierno peruano restableció lazos diplomáticos con La Habana.

Castro y Velasco (1971)

En otro momento que se involucraron Perú y Castro fue en 1980, cuando un grupo de cubanos se apoderó de la embajada peruana en La Habana porque querían irse de la isla, lo cual se produjo a través del puerto de Mariel. Un total de 125 mil personas se fueron en  seis meses.

Luego, en 1997, en plena crisis por la toma de la embajada de Japón en Lima por la organización terrorista Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA), el entonces presidente Alberto Fujimori viajó a La Habana para pedirle a Fidel Castro que otorgue asilo político a los subversivos; al final no se hizo ya que se prefirió una acción militar para recuperar el control de la sede diplomática japonesa.

Fujimori y Castro (1997)

Lo último fue la ayuda de Cuba para el Perú por el terremoto del 2007, que afectó a la región de Ica.

Dato:

• Los funerales en La Habana continúan para despedir al último icono del siglo XX en América Latina.

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