Una división de la palabra entre dos grandes mundos transmisores del lenguaje.
A través del tiempo, la palabra escrita ha sido un factor influyente en la sociedad, ir más allá de solo transmitir información, dar a conocer una idea y poder exteriorizar lo que se siente, o en contraste, lo que se puede ver.
El periodismo por su parte ha cumplido un rol importante a través del tiempo, en sus diferentes formas. La escritura se ha ceñido bajo algunos conceptos, que han evolucionado con el tiempo. El dar a conocer la noticia con el lenguaje claro y no buscar hacer periodismo para periodistas. Mientras más universal pueda ser el estilo, mejor será comprendido. En cada redacción debe guardarse el respeto por la palabra, la imparcialidad y sobre todo, por el lector.
Por otro lado, la literatura usa la expresión escrita como medio transmisor a un mundo paralelo, donde a diferencia del periodismo, se puede inventar y no ir en contra de la ética al hacerlo. Un medio y fin a la vez, una forma de crear historias faltas con trazos de verdad, arte que se puede nutrir del periodismo y otros oficios para seguir creando de una forma sublime, un camino sin fin.
Hay más de un caso de escritores que han laborado a lo largo de su vida como transmisores de la noticia, y han podido ver la transformación en una nación, o en varias. Porque la evolución tecnológica también afecta al periodismo y la literatura. Mario Benedetti, Gabriel García Márquez y Mario Vargas Llosa, son ejemplo de ello. Hombres que han enriquecido su obras literarias por haber experimentado la labor periodística.
La crónica de una muerte anunciada de García Márquez, es una de las pruebas de cómo un escritor puede revelar en términos del periodismo una gran novela; o, El coronel no tiene quien le escriba, obra tuvo lugar entre el espacio y el ocio en el exilio, a causa de asumir la labor periodística en su país. Un símil entre la jubilación del coronel y el sueldo que esperaba el recordado escritor colombiano.
Mario Vargas Llosa periodista a una edad temprana, con solo quince años dando sus primeros pasos en La crónica, en Perú. Fue un oficio que le ayudó a enriquecer sus novelas y la mira de poder experimentar a través del periodismo, otra perspectiva de la vida humana. El escritor ha expresado muchas veces su fastidio por el periodismo de escritorio (periodismo digital), dejando en claro, que este ha hecho que la noticia pierda jerarquía.
Al coincidir en el lenguaje, la literatura y el periodismo pudieron ser más cercanos. Sin embargo, se puede confundir al lector al tratar de hacer literatura en el periodismo, es una postura inaceptable en algunos medios escritos de renombre. Se aduce que al tratar la información de esta forma, podría perderse la objetividad de la noticia.
La redacción es ordenar ideas, con un fin. Una secuencia de palabras con un sentido, que expresan un mensaje hacia un grupo determinado. Siempre se debe tener en cuenta que queremos lograr con las palabras que escribimos, por qué hacerlo y cuál es el resultado que logrará. La noticia tiene que ser de fácil entendimiento, ágil y que pueda influir de alguna forma en las personas. Una novela, tiene que tener una ilación y trama que induzca a seguir leyendo, ese poder convertir al lector en el protagonista, llenar expectativas en cada página, porque en la mayoría de veces es una travesía de largo aliento. Es un medio transmisor de un mensaje que busca una finalidad, en algunos casos dejar alguna postura política, hacer alguna reflexión sobre temas de interés social o conflictos internos, la narrativa preferida por los lectores. Lo sencillo no quiero decir fácil, si entendemos bien esta pequeña frase podremos lograr textos interesantes sin emplear tecnicismos.
En conclusión, no hay una sola verdad en cuanto al periodismo y la literatura. Hay tanto estilos en la redacción como personas; por lo tanto, queda rendir homenaje al buen hizo del lenguaje. Empleando de mejor modo la información, logrando así un mensaje claro y directo, en el periodismo. Por su parte la literatura tiene una amplia gama de posibilidades para seguir llenando páginas y aportando a la educación, retumbando en la memoria y despertando curiosidades en los que asumen entrar en este mundo. En ambos casos, el buen uso de la ortografía es primordial para lograr textos de calidad. Este es un factor que mejora la comprensión entre cada párrafo y que resalta el respeto de quienes leen.
“Aunque se sufra como un perro, no hay mejor oficio que el periodismo”
Gabriel García Márquez
source http://segundoenfoque.com/entre-literatura-y-periodismo-00-284903/
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