Algunos lo llaman “stealthing”, otros abuso sexual

Algunas personas lo llaman stealthing, una práctica donde los hombres se quitan el condón o preservativo mientras practican sexo sin el consentimiento de su pareja. Otros lo llaman abuso sexual.

Darle un nombre oficial podría ser un apoyo importante para las víctimas de abuso sexual, muchas de ellas se enfrentan a una batalla cuesta arriba en el sistema legal, de acuerdo a un artículo publicado en el Columbia Journal of Gender and Law.

“Me preocupa que las víctimas de stealthing puedan tener problemas en la corte por las leyes actuales“, indicó Alexandra Brodsky, quien escribió el artículo cunado era apenas estudiante en la Escuela de Derecho de Yale.

Las víctimas de un ataque sexual pueden enfrentar una serie de “prejuicios y mitos” en la corte, dijo Brodsky. Por ejemplo, los miembros del jurado pueden negarse a ver un delito como “grave”, o simplemente no creer en la víctima, en los casos en que la persona ha tenido un relación con un presunto violador, o cuando su actividad sexual anterior se pone en cuestión.

En su escrito, Brodsky defendió una nueva ley que nombre específicamente la práctica “para atajar algunos de esos prejuicios” y proporcionar un camino jurídico más claro para las victimas, expresó.

La línea telefónica de asalto sexual ha recibido llamadas sobre la práctica del stealhing, según Brian Pinero, vicepresidente de la Red Nacional de Servicios a las Víctimas de Violación, Incesto o Abuso, que opera la línea.

“Si alguien es víctima, no es su trabajo demostrar nada“, manifestó Pinero, “Es nuestro deber recibir a esa persona y después tratarla con dignidad y con respeto”.

“El stealthing es claramente una violación del consentimiento”, aseveró.

“Sólo tú puedes consentir hasta dónde quieres ir”, dijo. Añadió que las personas pueden sufrir daños psicológicos y físicos después de que les suceda algo así.

Estos daños pueden incluir infecciones de transmisión sexual, angustia emocional y embarazos nos deseados, describió Brodsky en su artículo.

Brodsy no pudo determinar la frecuencia con la que sucede, pero se llevó a cabo una serie de entrevistas con mujeres sobre sus experiencias. También redactó sobre sitios de internet donde los autores presumen sobre el stealthing y comparten consejos sobre cómo hacerlo.

 

source http://segundoenfoque.com/algunos-lo-llaman-stealthing-otros-abuso-sexual-50-347073/